Mariano y Hernán nos confiaron la resignificación de su marca y el rediseño del salón, frente y vereda de esta pizzería tan querida por los vecinos de Mataderos. Habían decidido recuperala junto con las recetas originales que la hicieron famosa desde sus inicios en 1969 y con el deseo de poner en valor la historia del lugar, honrando la trayectoria que tenía en el barrio como un espacio de encuentro, amistad y buen comer.

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Nos encargamos de expandir la marca y su universo gráfico basándonos en la pasión por la pesca que compartían sus fundadores y que insólitamente le dió nombre al establecimiento el fin de semana previo a su apertura luego de un día de pesca.

 

Así fue que llevamos adelante un trabajo de ambientación en interior y exterior con una obra de ampliación de instalaciones incluída y un evento de inauguración que convocó a medio barrio gracias a la creación de una presencia online hasta ese momento inexistente.

En una segunda etapa publicamos un Website renovado y nos encargamos de las cuentas en redes sociales que plantarían la semilla para el futuro crecimiento de la pizzería atrayendo a visitantes de nuevos barrios y fidelizando a los conocidos de siempre.